5.7.09

Las primeras del día.

Si bien dedicaré un espacio de mayor amplitud a reseñar lo que haya acontecido a lo largo del día, y a comentar los resultados de la votación aún en curso, de momento creo conveniente apuntar, a vuelapluma, las noticias que han ido apareciendo en torno a los comicios, para tener una pequeña idea del acontecer "minuto a minuto", como dirían algunos:
- En Playa del Carmen, los medios de comunicación descubrieron una casa en la que el PRI entregaba despensas a cambio de votos. Al percatarse de la presencia de los medios, los sujetos en cuestión salieron de la casa y, sin mediar palabra, arremetieron contra un par de reporteros, a quienes dejaron lesionados y sin sus equipos de trabajo para eliminar las evidencias. Minutos más tarde, los mismos individuos comenzaron a patrullar las calles machete y palo en mano, con el fin de evitar que los periodistas les caigan en más movidas.
- En Zacatecas, el PRD ha denunciado que el PT compra votos con dinero en efectivo; como muestra, incautó $200,000 a tan singulares "promotores del voto".
- En Tabasco, el PRD ha denunciado... al PRD por acarrear votantes.
- En un municipio de Guanajuato -Salvatierra, me parece-, el narco ha amenazado a los candidatos del PAN y del PRI; es decir, gane quien gane, la tiene sentenciada.
- En Veracruz, una camioneta embistió -y mató- al candidato del PAN a la presidencia municipal de Pánuco. Curiosamente, la camioneta es propiedad del marido de la candidata priísta.
- En la delegación Miguel Hidalgo del Distrito Federal, Ana Guevara repitió que "ya ganó", aun cuando la votación apenas se desarrolla y los números no le son favorables.
- En Hermosillo, la policía estatal allanó las instalaciones del PAN local y se robó una computadora. ¿Para qué? Aún se ignora.
- En San Luis Potosí, creo recordar que en Ciudad Valles, el candidato priísta a la gubernatura denunció que su camioneta había sido baleada.
- En el municipio poblano de Santa Rita Atlahuapan, el presidente municipal impidió que los ciudadanos votaran, y mandó a su mujer para que promoviera el abstencionismo.
- Como noticia positiva, los delegados de los tianguis capitalinos no han hecho acto de presencia, hasta este momento, para exigir a los puesteros su voto por el PRD. Lo más probable es que no tengan la menor idea de si deberán solicitar amablemente el voto para los amarillos, los rojos, o los naranjas.
- En los municipios de Chimalhuacán, Chalco y Nezahualcóyotl, el PRI entregó tarjetas de una tienda departamental para asegurarse votantes.
- En Iztapalapa, sujetos desconocidos, o tal vez no, y que podrían presumirse amarillos o rojos, asaltaron una casilla y golpearon a quien se les puso enfrente.
- En la Alameda Central de la Ciudad de México, los anulistas hicieron un mitin para promover su postura. Creo que, si se ha cortado el proselitismo político desde el 1o. de julio, este tipo de manifestaciones también deberían limitarse en este momento.
- El dato curioso lo constituye el hecho de que la tinta "indeleble"utilizada en las casillas locales del Distrito Federal... no es indeleble. Yo voté hacia la 1 de la tarde y, al momento de escribir estas líneas -las 3 de la tarde-, mi dedo sólo muestra el rastro de la tinta empleada en las casillas federales.
Así están las cosas. Al parecer, la amenidad proseguirá hasta que, a las seis de la tarde, cierren las casillas, y el show comenzará cuando se den a conocer los resultados.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Te mando una "joyita", de un "eminente" cófrade tuyo: Ruben Espino, Alcalde Panista de San Luis Rio Colorado.

Con razón es buen negocio la "apuesta vital" por el PAN.

http://www.youtube.com/watch?v=cF36k36vJNo

Alfredo R. I. dijo...

Bien, vamos por partes, que el video lo amerita. Conste en actas -de una vez, para que luego no haya algún desaguisado- que, ni soy defensor ex officio de toda la gente que existe dentro de Acción Nacional -donde igual conviven la gente honesta y la basura-, ni me voy a prestar a insultos como la vez pasada. Así es que, estimado anónimo -que no lo eres en la medida en que lo desearías, pero te daré gusto-, analicemos, escribamos, dialoguemos, no como la otra ocasión en que todo era dar vueltas y vueltas de tu parte.

Ante todo, en ningún lugar consta que los personajes que hablan... de lo que hablan, sean quienes el video dice que son. De ninguna manera, y es el problema de las grabaciones: lo mismo podríamos poner a la plana mayor del ayuntamiento de San Luis Río Colorado -lo cual es conveniente hoy que al PRI se le escapa Sonora de las manos- que a los integrantes del ayuntamiento de Chimalhuacán, de Ecatepec, de Campeche, o de San Felipe Torres Mochas. Contra la identificación hay, además, un detalle de importancia: con lo denso que es el acento sonorense, debería ser reconocible desde un principio; en cambio, estos tipos parecen sacados de algún pueblo de Querétaro, de Jalisco, o de San Luis... Potosí.

Ahora bien, supongamos que son quienes dicen ser. ¿Qué es lo que van a hacer? No se sabe. Posiblemente van a "tumbarse" los prediales para completar su gasto, lo cual suena plausible pero no está claramente expresado. Lo único es que alguien menciona, en una ocasión, que es posible que los acusden de "robo", o de "peculado", pero nada es claro. Incluso, el final es todavía más enigmático, cuando el sujeto A habla de que quiere todo "limpio y ordenado", lo cual pudiera parecer un buen plan para robar, pero también para hacer la infinita cantidad de negocios que se realizan en cualquier esfera de la administración pública a nivel municipal, estatal y federal, que no necesariamente implica meterse en la bolsa los dineros sino obtener provecho de las obras que se harán. El botón de muestra son el Pedregal y Polanco, comprados a precio de ganga y revendidos carísimos porque se poseía información privilegiada, que permitía adivinar la descomunal alza en la plusvalía de los terrenos.

La última, de momento: si el delito es "tan" claro como pareciera, ¿por qué no se hace la denuncia correspondiente? ¿Por qué ese afán de operar por las orillas de lo legal? Siempre será preferible montar una buena demanda, y al carajo todos los involucrados, que hacerle al Lydia Cacho y escribir sabrosos libros de denuncias que brindan buenos dineros por concepto de regalías o, en este caso, darán ventajas electorales de magnitud incognoscible.

Jesús Misael dijo...

Según entiendo, primero habría que asegurarse que las voces que se presentan corresponden a las personas que se mencionan.

Luego, suponiendo que sean sus voces, todavía faltaría ubicar el contexto exacto en el que la palabra "robo" significa "posible negocio de la administración pública".

Por último, en caso de "posible delito" habría que dejar de lado estrategias poco efectivas para la aplicación de la justicia. Por lo cual sugieres, una denuncia en tiempo y forma, en contra de los funcionarios implicados.

De lo anterior, todo suena razonable, en especial la última sugerencia.

Por lo demás, no cabe suponer ni que sean ciertas las acusaciones, ni que no lo sean. No hay que caer en la tentación de comprobar lo que ya se da por supuesto:

1. "Que el ladrón es ladrón"
2. O que, "el gobernante hace negocios legítimos de administración pública."

Por último, no sé que tanto sirva sugerirte que no seas "omni-abarcante" y "pleno" de certeza en la narración de los hechos que mencionas (a manera de reseña en tu post): ir de Zacatecas a Veracruz, pasando por Hermosillo y Salvatierra. ¿Sabes porqué?

Porque puede resultar que tal vez, repartir despensa no sea "compra de votos" sino "motivación para el voto razonado", o que "amenaza y sentencia de muerte" sean "conminación y propuesta", o que "robar computadoras" sea una forma original de "poder llevar Enciclomedia a comunidades indígenas"... etc.


Saludos

Alfredo R. I. dijo...

Gracias por el comentario. Lo único que no me quedó claro fue lo último que mencionaste, a partir de "no hay que caer en la tentación de comprobar lo que ya se da por supuesto" que, si entiendo bien, buscaría disminuir la densidad de la argumentación -suena muy bueno y plausible- al sentar algo medianamente comprobado -lo que podría llevar a incrementar el peso de la inferencia sobre la prueba, lo que ya no es tan bueno-. Y, en cuanto a lo último, confieso que no he entendido bien a bien qué me quieres decir. Si acaso pasearas de nuevo por estos lares y abrieras mi entendimiento, te lo agradecería mucho.